¿Cómo hacer el masaje perineal durante el embarazo?
El masaje perineal es una herramienta muy eficaz para prevenir lesiones durante el embarazo/parto y postparto. Constituye un factor de protección contra el trauma perineal obstétrico, aumentando la incidencia de partos con periné intacto.
Te recomendamos que leas esta entrada junto con este vídeo donde te explico la Técnica del Masaje Perineal.
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VENTAJAS del masaje perineal:
- Reduce la incidencia de episiotomías y desgarros (aunque no garantiza que no haya lesiones perineales).
- Flexibiliza los tejidos para que sean más elásticos.
- Ayuda a percibir sensaciones similares al momento del parto.
- Disminuye el dolor y restablece la normalización de los tejidos en el postparto.
- Muy eficaz en la resolución de las disfunciones sexuales de la mujer.
El masaje perineal se hará a partir de la semana 33- 35 todos los días o días alternos dependiendo de la valoración de tu fisioterapeuta especializado. Normalmente no es necesario más de 10-15 minutos.
Siempre se aconseja antes un consentimiento de tu ginecólogo, por las posibles contraindicaciones del masaje perineal:
- Infecciones de orina o vaginales.
- Riesgo de aborto, riesgo de parto prematuro…
- Varices vulvares ó ablandamiento del cuello del útero.
- En caso de cesárea programada, no sería necesario el masaje perineal. Pero sí será importante una valoración a partir de la sexta semana postparto.
Puede ser que la musculatura perineal esté más tonificada de lo normal o más debilitada, dependiendo del estado de la musculatura será necesario hacer masaje perineal más días o simplemente hacer ejercicios de tonificación del suelo pélvico y transverso abdominal. Por eso es muy importante que acudas a una valoración previa con tu fisioterapeuta especializado.
Si tienes un tono aumentado durante el embarazo, incluso dolor en las relaciones, la práctica del masaje perineal puede realizarse todos los días. Pero si hay una hipotonía del suelo pélvico (debilidad) o has tenido partos anteriores quizás sea bueno combinarlo con otro tipo de ejercicios de la pared abdominal y del suelo pélvico. También en mamás que ya han dado a luz anteriormente, se recomienda trabajar la zona de la episiotomía para flexibilizar y normalizar el tejido cicatricial.
Si tiene dudas, ven a una consulta conmigo, te atenderé personalmente.
¿Cómo se hace el masaje perineal?
Se recomienda a partir de la semana 33 todos los días, días alternos o 3 veces a la semana, 10-15 minutos siguiendo las recomendaciones siempre de tu fisioterapeuta.
Se puede utilizar aceites vegetales de caléndula, onagra, aloe vera, rosa mosqueta o lubricantes neutros en base acuosa (por ejemplo este que me gusta mucho: Lubricante base acuoso OPTILUBE). Un buen aceite es el de Weleda «Aceite de masaje perineal «, puedes comprarlo en farmacias o herbolarios.
Es preferible hacerlo con GUANTES (personalmente me gustan más los guantes de nitrilo sin polvo, pero si no eres alérgica puedes utilizar también los de látex). Es mejor hacer el masaje con el recto vacío, así no notarás ganas de ir al baño.
Lo más eficaz es que sea el fisioterapeuta el que enseñe a tu pareja a realizar el masaje, pero también puedes hacerlo tú misma.
Al principio puedes notar dolor al realizar el masaje o algo de escozor por la sensación de estiramiento. Empieza más suave y poco a poco vas profundizando. Cada día lo irás notando más elástico y flexible. Ante cualquier duda consulta a tu especialista (médico, matrona o fisioterapeuta).
Si finalmente haces el masaje tú misma:
Prueba la postura más cómoda: sentada en la cama con muchos cojines, de pie con una pierna elevada sobre una silla o en la ducha con una pierna elevada apoyada. Las primeras veces, si lo necesitas, puedes ayudarte de un espejo para ubicar mejor la zona del periné. Normalmente utilizarás un pulgar o ambos pulgares para realizar el masaje perineal.
Al principio sentirás que no consigues hacerlo bien, y seguro te desesperas, pero cada día irás encontrando la postura más cómoda.
¿Cómo hacemos el automasaje?
Masaje Perineal Externo:
Masajea la zona externa de los músculos del suelo pélvico, presiona el espacio entre la vagina y el ano y los músculos cerca de los isquiones. Puedes hacerlo con el pulgar o incluso con tus dedos índices y medios. Busca zonas de tensión y mantén la presión unos 30 segundos.
En esta foto puedes ver los Músculos más superficiales del Periné. Presiona en el centro, en el espacio entre la zona de la vagina y ano. Ese es tu núcleo fibroso central del periné.
Masaje Perineal Interno:
Imagina que la zona perineal es un reloj, siempre trabaja en el recorrido de 9 a 3. Es preferible no trabajar la zona de la uretra para evitar riesgos de infección. Introduce tu pulgar o ambos pulgares unos 4 o 5 cm, es decir, el pulgar introducido por completo.
- Realiza una PRESIÓN HACIA EL ESFÍNTER, HACIA MENOS 20 Y HACIA Y 20: Presiona hacia abajo, luego al lado derecho e izquierdo. Imagina ese reloj donde las presiones deben ir dirigidas hacia y media, menos viente y veinte. Mantén la presión de 30 segundos a 1 minuto, intenta hacer respiraciones profundas y tranquilas para relajarte.
- RASTRILLO: Presiona en todo el recorrido de 9 a 3, como si tu pulgar fuera un gancho. Donde sientas tensión, presiona hasta que notes que el tejido se va relajando.
Recuerda que es importante llegar a la parte profunda de los músculos del suelo pélvico, introduciendo por completo el pulgar. Si solo te quedas en la parte superficial no estás trabajando todos los planos musculares.
Si es la pareja quien hace el masaje:
Una postura bastante cómoda es que tu pareja se siente en un taburete o una silla al final de la cama y tú te coloques tumbada con muchos cojines también al final de la cama con las piernas separadas apoyadas en varios cojines, simulando la posición ginecológica.
O también tumbada en la cama con muchos cojines en la cabeza y en las piernas, tu pareja puede ponerse al lado de la cama, a la altura de tu pelvis. Utilizará el dedo índice y medio.
Desde Lucetuembarazo te recomendamos que acudas a tu fisioterapeuta especializado.
MASAJE PERINEAL EXTERNO:
- Presión en el Núcleo fibroso central del periné con pulgar o 2 dedos o nudillos. Tu pareja realiza una presión en el punto del centro y la mantiene durante 1 minuto. Puede ir de superficial a profundo según vayas tolerando la presión. Luego cambia hacia el lado derecho e izquierdo. Es importante que vaya buscando las zonas más tensas de la musculatura superficial del suelo pélvico.
MASAJE PERINEAL INTERNO:
Para la segunda parte del masaje es necesario cambiarse de guantes. Con aceite o lubricante, la pareja empezará primero con 1 dedo y luego introducirá el segundo dedo según la mujer vaya relajando la zona perineal.
La zona del periné se trabaja como un reloj, sólo de 9 a 3. No tocar la zona de la uretra para evitar posibles infecciones.
- Presión: Con el dedo índice o con el índice y medio si la zona perineal lo permite, tu compañero (a) presiona en el centro haciendo un pequeño estiramiento hacia abajo, luego al lado derecho e izquierdo. Puede imaginar un reloj donde las presiones deben ir dirigidas hacia y 20 y hacia menos 20, lo ideal es que mantenga la presión unos segundos hasta que vayas sintiendo que la zona va relajando y es más elástica.
- Rastrillo: es como hacer una «U» en el recorrido de 9 a 3 presionando con el índice y medio. Es mejor realizar sólo presión y no mucha fricción o demasiado movimiento en la piel para no provocar sensación de irritación.
- Tracción con contracción: Le pedimos a la mujer que contraiga de 5 a 10 segundos su suelo pélvico, el compañero (a) que está haciendo el masaje, acompaña esta contracción (no hace resistencia) – la mujer relaja el suelo pélvico y el compañero (a) intenta avanzar y relajar más el tejido. Luego se realiza igual pero los dedos en posición -20 y 20.
RELAJACIÓN DEL SUELO PÉLVICO:
Termina el masaje perineal practicando tu respiración abdominal y relajando tu suelo pélvico.
Coge aire por la nariz hinchando suavemente tu abdomen y al soltar » Imagina tu suelo pélvico como una flor que abre sus pétalos hacia fuera, o la sensación que quieres que se escape un gas sin empujarlo…». Puedes soltar el aire por la nariz o por la boca, según te sientas más cómoda.
Te recomendamos también este video de youtube para aprender a relajar el suelo pélvico.
Notas:
- Realiza el masaje perineal con guantes, y siempre que pases del masaje externo al interno, cámbiate de guantes para evitar posibles riesgos de infección.
- Pregunta a tu ginecólogo sobre la práctica del masaje perineal, para descartar cualquier tipo de contraindicación (riesgo de parto prematuro, cándidas, varices vulvares…).
- Recuerda trabajar no sólo la parte superficial sino la profunda. Si observas esta imagen de la musculatura del plano profundo del suelo pélvico, entenderás que por todos esos músculos tiene que pasar tu bebé y tienen que estar lo más elásticos posibles.
Los nuevos protocolos están tratando de reeducar a los profesionales para intervenir lo menos posible. La episiotomía ya no se hace por rutina, sólo cuando es necesario. La evidencia científica ha demostrado que su uso sistemático tiene efectos perjudiciales, tales como: incremento del dolor perineal postparto, dispareunia (dolor en relaciones), mayores tasas de infección y periodos de cicatrización más largos con respecto a pequeños desgarros perineales espontáneos. Según las propias recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la indicación de realizar la episiotomía debe ser determinada de forma totalmente individualizada y en casos muy bien seleccionados.
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